miércoles, 29 de septiembre de 2010

- Pero díselo.
- ¿El qué?
- Que la quieres.
- Ni hablar, su avión sale esta noche.
- No tienes nada que perder, y te arrepentirás si no lo haces. Yo nunca se lo dije lo suficiente a tu madre. Tendría que habérselo dicho cada día, porque era perfecta cada día.

No hay comentarios: